No volveré a querer hasta que deje de quererte. No me liaré
en el amor hasta que no me alíe con tu olvido. Da igual el tiempo que pase, los
sucesos que ocurran. Sé que no volveré a sentir algo parecido hasta que no
destierre todo lo que tú me hiciste sentir y que no puedo evitar añorar. No tendré felicidad eterna hasta que no me
acuerde ya de tu ideal de felicidad. No me pincharé con las ramas del rosal de
otro laberinto hasta que no consiga hallar la salida del tuyo. Da igual si es
verano o es otoño, si tengo frío o hace calor. Sé que otros brazos no me proporcionarán
calor suficiente en los días en los que el termómetro marque menos tres grados.
No, no volveré a quererte hasta que deje de querer ¿O era al revés?
G. S. Díaz "¿O era al revés?"