Y sé que…que es la única forma de que podamos estar juntos.
Es la única manera sin que tengamos que tener esa imperiosa necesidad de
escondernos, de protegernos, de disimular, de llevar esta doble vida cada uno
por su cuenta.
Es el modo en que nuestros dos corazones puedan latir al
unísono: yéndonos lejos de aquí, de la misma gente, de la misma rutina,
yéndonos donde nadie, y digo nadie, nos pueda encontrar.
Pero también sé que…que es imposible dejar atrás tanto y
tanto. Que es complicado dejar atrás todo lo vivido, todo lo que has tenido,
todo lo que tienes, que es difícil deshacerse de esos miedos tan sólo por una
simple ilusión. También sé que es improbable que esas ilusiones se puedan
convertir en realidad.
Y es que…nuestra vida está a miles de kilómetros de aquí y
ambos lo sabemos. Pero puede más el miedo, las dudas, puedes más el sentimiento
que aquí tenemos arraigado que el de jugárselo todo, no puede el amor…
G. S. Díaz, "No puede el amor."
