Nunca
supe cómo afrontar los problemas. Tampoco los dilemas. Ni siquiera las
situaciones incómodas que no tienen por qué serlo. Nunca supe encarar determinadas
situaciones porque no sé captar la esencia de una mirada cuando mi mirada la
desea. Nunca sé encontrar las palabras precisas, el valor suficiente y el
momento perfecto y es por eso que dejo pasar el tiempo y los besos. Nunca supe
lo que una despedida de dedos significa, porque puede tener múltiples
interpretaciones. En cambio, siempre entendí lo que quiere decir la letra de una
canción.
Gregorio S. Díaz "Nunca supe"