Rotundamente, no. Me niego a convertirme en escarabajo. A llamarme Gregorio
y apellidarme Samsa. No deseo retorcer historias como Kafka. No quiero convertirme en un bicho raro. De esos que ven
triple y no sienten nada. Bueno sí, lo pesado de su carga. Nada más. Paso de
tener que vivir solo por las palabras. A veces necesitas escucharlas, no solo
leerlas. Aunque estaría bien, vivir allí, por, para y dentro de ellas. No
quiero seguir segregando líquido por los ojos, ni soltando latigazos por la
lengua. No quiero tener que esconderme por pensar en lo que otros pensarán. Soy
como soy y no lo puedo ocultar. Yo no elegí, es cierto, pero nadie elige lo que
le toca. Si no lo acepto no es por mí, sino por esta puta macabra sociedad, que
hunde hasta al que tiene más dentro de sí. Quiero dejar de evolucionar, de
crecer. Parar esta metamorfosis. No quiero seguir. No quiero ser de esos que se
olvidaron por completo de querer.
Gregorio S. Díaz "Metamorfosis"