Con la tecnología de Blogger.

17 de septiembre de 2020

Portal 72.

0 comments

Cómo temblaban mis dedos hablando de castillos y princesas. Como lo hacían mis piernas, cuando te tenía tan cerca. Escuchando cómo todos los caminos llevaban a Roma, por primera vez. Cómo arrugabas el hocico cuando te concentrabas en leer y pensar todas aquellas palabras que nos ha brindado la Historia. Recuerdo como me leías a mí, mis historias y letras, pegada casi a la pantalla, y luego te daba por mirarme y sonreír. Cuando de reojo me buscabas y yo ni cuenta me daba que tus ojos me radiografiaban. Cuando, muy juntos, escribíamos lo mismo, con el café tiritando, a punto de soltar sus amargas gotas sobre teclados ya corroídos por el uso. Cuando odiabas toda la contemporánea y jurabas no saberte nada. Cuando me decías lo rojo que era y que al señor del bigote me parecía. Cuando te perdías en “Te tengo que llevar” mientras lo redactaba. Tuve que acabarlo cuando me dejaste en la estocada, como si así fuera a cerrar un ciclo, un círculo, o algo. Me necesitabas, más que yo a ti, no por la carne, el amor, los besos ni nada, solo por el enfoque, la perspectiva, las palabras encadenadas. Quinto puso, portal 72. Vete, pero quédate. Todo el mundo lo sabe, pero cállate, no se lo digas a nadie. Un animalillo, el idiota al que fingías echar de menos.


Gregorio S. Díaz "Portal 72" 




No hay comentarios:

Publicar un comentario